Reto literario. La caja de Pandora
La caja de Pandora ¿Qué tendría hoy tu caja de Pandora? ¿con quién la abrirías? Mi caja de pandora .Comienza tu relato «La esperanza es lo último que se pierde».
La esperanza es lo último que se pierde, pero yo la perdí cuando tuve que despedirmede ti. Recuerdo tener aquella caja que me diste cuando era pequeña y me dijiste queno la abriera bajo ningún concepto, solo cuando ya no estuvieras. Todos estos años tehe hecho caso y aunque te hayas ido sigo sin abrirla, porque eso significa que esverdad que ya no te vería más; y eso conlleva a no ver tus rizos perfectos, tus ojosmarrones, tus labios pintados de rojo, tu sonrisa, tus bailes…Todavía no me hago a la idea de esto, todo está muy apagado desde que te fuiste.Ojala pudieras ver todo lo que he cambiado, aunque estuviese mejor si estuvieras ami lado. He aprendido a valorarme un poco más, a aprovechar más el momento y aintentar pasar más tiempo con las personas que quiero. Ahora puede que sea un pocomás divertida y risueña, aunque también soy más sensible y me está costando muchosuperar tu pérdida.Tengo mucha curiosidad por saber qué es lo que hay dentro de aquella hermosa cajaque me diste, así que creo que ya es hora de abrirla. Empecé a buscar y la encontréen un cajón bajo mi cama. No quería abrirla sola porque estaba muy nerviosa, así quemi madre me acompañó en todo este proceso, dándome también mi espacio. Nossentamos juntas en el sofá y me dispuse a abrirla. Nada más verlo me puse a llorar ycuando me controlé empecé a leer una carta que decía: «Hola pequeña, espero quetodo esté bien y no estés sufriendo mucho, si estás leyendo esto significa que estoy enun lugar donde ya no sufro. Esta caja te la di porque siempre percibí que erasdiferente y especial, cosa que me gustó mucho. Dentro de ella hay algo muyimportante para mí, es una pulsera que me regaló mi madre, pero no una simplepulsera, cuando te la pones te da protección, esperanza, felicidad y salud. Sé queahora mismo todo esto te sonará muy extraño pero con el paso del tiempo loentenderás. Siempre supe que debía ser para ti y es muy importante que entiendasque nadie puede saber cuál es su función. Sé muy fuerte, yo estaré donde tú vayas, tequiero». Con los ojos llorosos, cierro la carta y me la guardo. Luego, observo aquellapulsera plateada y brillante que hay dentro de la caja y mi madre me ayuda aponérmela. No sé qué pasó, pero al tenerla puesta te sentí muy cerca y eso me dioesperanzas para seguir adelante.
Texto María Herrero Márquez
Ilustración: Gabriela Mirón Madalina